Este artículo forma parte de la serie de contenidos del espacio ELECCIONES USA 2020, donde irán escribiendo distintas firmas invitadas.
El 5 de noviembre de 1872, mientras los estadounidenses votaban en las que eran ya sus vigesimosegundas elecciones presidenciales, uno de sus candidatos pasaba la jornada en prisión. Era Victoria Woodhull, y su candidatura era excepcional por tres motivos: era menor de 35 años, no tenía derecho al voto, y era mujer. Era, de hecho, la primera mujer que aspiraba al cargo.
Casi 150 años después, ninguna mujer lo ha alcanzado todavía. ¿Puede 2020 ser el año en el que, finalmente, una mujer se convierta en Madam President? Hay tres cuestiones que determinan la respuesta:
1. ¿Está preparada la sociedad estadounidense?
Para el Partido Demócrata, el gran dilema de las primarias es la elegibilidad, encontrar un candidato que pueda apelar a la mayoría de los votantes y ganar la presidencia. Ser mujer es considerado un punto en contra en este sentido.
Un 52% de los estadounidenses, concretamente el 60% de las mujeres y el 45% de los hombres, declaró que se sentiría muy cómodo teniendo una presidenta. Y, sin embargo, un tercio considera que sus vecinos no estarían dispuestos a votar por una mujer. Estos datos resumen el sesgo social al que se enfrentan las candidatas: “Yo no tengo prejuicios, pero mis vecinos sí, por lo que debo nominar a un hombre”.
Además, los demócratas todavía están superando la traumática derrota de su primera candidata: Hillary Clinton. Pero es precisamente su experiencia la que nos dice que la elegibilidad de las mujeres no está en duda: perdió las elecciones, pero lo hizo porque su campaña no consiguió motivar a los votantes de estados clave para el Colegio Electoral. Que ganara el voto popular con casi 3 millones de papeletas más que su rival demuestra que los ciudadanos están dispuestos a superar el sesgo del género.
2. ¿Pueden las actuales candidatas ganar la nominación del Partido Demócrata?
Las candidatas demócratas fueron las que más triunfaron durante las últimas Midterms en Estados Unidos. No solamente consiguieron una representación histórica de mujeres tanto en el Congreso como en el Senado, sino que fueron las que más asientos arrebataron a candidatos republicanos que buscaban su reelección. No podemos olvidar que las mujeres son además uno de los electorados base del Partido Demócrata: el éxito en las Midterms no se entiende sin la movilización de las mujeres en las elecciones y quieren elegir a una mujer como su representante.
El perfil de las candidatas a la nominación también ofrece motivos para su elección: entre ellas hay militares, senadoras, académicas y fiscales, sus trayectorias incluso superan a las de sus competidores varones. Warren, Harris, Klobuchar y Gillibrand no han perdido ninguna elección a la que se han presentado y han brillado en los debates de las primarias. Según las encuestas, Elizabeth Warren tiene una posibilidad muy real de ganar la nominación, superando a Bernie Sanders y a la zaga de Joe Biden.
Así, estas mujeres ya han ganado numerosas veces a lo largo de su trayectoria política, y el electorado parece dispuesto a apoyarlas, solo queda que les den la oportunidad de enfrentarse a Donald Trump.
3. Pero ¿tienen opciones de vencer al presidente?
Es aquí donde los demócratas pueden ver reducido su entusiasmo, y es que desde 1900 solo cinco presidentes no han logrado la reelección.
La nominada demócrata deberá enfrentarse a un Donald Trump que no se habrá desgastado en un proceso de primarias, y cuyo volumen de recaudación y capacidad de hacer campaña supera con creces a la de cualquier otro candidato. El clima de polarización política, que ha producido una gran crispación entre republicanos y demócratas, también juega a favor de Trump, ya que los republicanos pueden votar por el presidente simplemente por no beneficiar a los demócratas. Además, su campaña permanente durante la presidencia ha logrado mantener la fidelidad de sus seguidores más duros.
Ganar a Trump requerirá una campaña eficaz en el Midwest y la participación en masa de la diversa base demócrata, retos que van más allá del género de la persona nominada.
El Partido Demócrata tiene a las candidatas perfectas, pero se enfrentarán a la tormenta perfecta.
(Más recursos e información en ELECCIONES USA 2020)
Fotografía: Raúl Nájera para Unsplash