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Todo es política. Incluso Taylor Swift

BRENDA SILVA

Este artículo forma parte de la serie de contenidos del espacio ELECCIONES USA 2024, donde irán escribiendo distintas firmas invitadas.

Taylor Alisson Swift es, no sin debates, la cantautora más popular del momento, como lo corrobora, entre otros datos, que, al menos, el 53% de los estadounidenses se identifica como fanático de la artista, a marzo del 2023. Cuando la campaña presidencial demócrata filtró hace unas semanas que buscaba su endorsement, Taylor se convirtió en un nuevo objetivo de la guerra cultural que domina la sociedad y la política estadounidense.

Taylor es una mujer de 34 años que no ha dudado en involucrarse en causas. Por citar algunos ejemplos: se ha enfrentado en reiteradas oportunidades a su industria para advocar por prácticas que favorezcan el trabajo y los derechos de los y las artistas; personalmente, ha movilizado a su leal comunidad de fans para recoger firmas en apoyo al Equality Act contra la discriminación de personas de la comunidad LGBTI+; denunció y compartió su propia experiencia de acoso sexual y fue parte de la primera ola del movimiento Me too; y ha criticado públicamente a candidatos republicanos que «no representan los valores de Tennessee», la ciudad en que creció.

Estas, además de una popularidad única que trasciende divisiones políticas y sociales, son razones suficientes para convertirla en una figura deseada por el Partido Demócrata. Para recordar las causas a defender para «salvar el alma de América», uno de los frentes de la campaña de Biden; para movilizar la participación de los jóvenes que creen en lo mismo pero que hoy están desencantados de la política como medio para lograrlo; y para arrojar luz sobre el candidato del partido como un aliado.

Son esas mismas razones las que la convierten también en un objetivo de ataque para el Partido Republicano, para quienes Taylor Swift se ha convertido en un ejemplo del liberalismo y la cultura woke. Donald Trump no ha dudado en advertirle que no apoye a Biden, «que no sea desagradecida» y en calificar a ella y a su pareja como liberales. Mientras tanto, diversas voces aliadas como Fox News e influenciadores en redes sociales no han dejado de desacreditar a la cantante. La critican por los viajes en su jet privado y su impacto ambiental, un tema precisamente de interés para los jóvenes a los que ella podría llegar, o la denuncian por su supuesta colaboración en un complot para beneficiar al Gobierno y diversas teorías conspirativas que un sorprendente 18% de la población parece creer.

En general, le reclaman que no se meta en política. Aun cuando son los políticos quienes  esta vez la han «politizado», lo cierto es que, probablemente, Taylor Swift no pueda escapar de la política en 2024. Todo es política, solemos decir, pero nunca este mantra probará ser tan contundente como en Estados Unidos este año.

Lo que leemos es política, lo que vemos en el cine o escuchamos en Spotify es política, y las celebridades que seguimos o rechazamos son política también. Por eso, sin importar el impacto que tenga su endoso, es posible que Taylor se pronuncie sobre la elección. No sería la primera vez que lo haga, ni la primera vez que apoye a Joe Biden, ya lo hizo en 2020. Solo que, al tratarse de una elección tan reñida —como todo apunta que será— y con tanto en juego para los estadounidenses en cuestiones identitarias y de valores, la política lo alcanzará todo y a todos. Incluso a Taylor Swift.

Entonces, el endoso sería cuestión de tiempo, y muchos apuntan a The Eras Tour, su multitudinaria gira, como el lugar para hacerlo. Del 18 de octubre al 3 de noviembre, Taylor Swift regresará a los escenarios de 3 ciudades de Estados Unidos. Desde ahí y hasta 2 días antes de la elección podría dirigirse a sus fans, como ya lo ha hecho antes por otros motivos, pero esta vez con mensajes políticos: ya sea un endoso directo o un llamado a registrarse e ir a votar. Y lo haría nada menos que en Florida, un Swing State y centro de batalla electoral, e Indianápolis y New Orleans, dos Red States. Si lo hiciera, será una evidencia más de que las campañas no están solo en los mítines, ni los debates; en esas fechas, asistir al Eras Tour también será política.

Fotografía: Paolo Villanueva en Flickr
(Más recursos e información en ELECCIONES USA 2024)

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