Este artículo forma parte de la serie de contenidos del espacio ELECCIONES USA 2024, donde irán escribiendo distintas firmas invitadas.
«El mundo entero está mirando». Bajo este lema, en 1968, los manifestantes, en su mayoría jóvenes, se reunieron en las afueras de la Convención Demócrata en Chicago para reclamar por la Guerra de Vietnam. Rechazaban la participación de Estados Unidos en el conflicto bélico y reclamaban reacción a la clase política. Estas protestas terminaron con una brutal represión policial contra los manifestantes. Y fue uno de los peores momentos de la historia del Partido Demócrata.
El lunes, en el inicio de la Convención Demócrata en Chicago para proclamar la candidatura de Kamala Harris a la presidencia de los Estados Unidos también hubo protestas, en este caso, contra la guerra en Gaza y la posición del partido hacia Israel. «Los demócratas quieren un genocidio con buenos modales», rezaban las pancartas fuera del recinto del evento. Son pocas las similitudes con los sucesos de 1968, pero el eco del pasado ha estado presente.
Si bien la participación en las protestas ha estado por debajo de lo esperado por los organizadores, han puesto de relieve las divisiones entre los demócratas. Según una encuesta de Reuters/Ipsos, alrededor del 44% de estos votantes han señalado que desaprueban la gestión sobre la guerra en Gaza por parte de Biden. En esta línea, según una encuesta del Pew Research, el 44% de los demócratas se oponen a apoyar la ayuda militar a Israel y el 25% se manifiesta a favor. Esto también se ve reflejado en los jóvenes: el 36% de las personas entre 18 y 29 años cree que Biden se inclina demasiado hacia Israel; el 12% cree que está logrando equilibro adecuado; y, solo el 13% considera que favorece a los palestinos. Además, el 16% apoya la ayuda militar a Israel vs el 45% que la rechaza.
Las protestas estudiantiles contra la guerra en Gaza
Al igual que en 1968, los estudiantes también están siendo protagonistas de la campaña electoral. En los campus universitarios ha habido protestas reclamando un al alto el fuego en Gaza y pidiendo al gobierno de Estados Unidos retirar el apoyo militar a Israel. Según el Observatorio de protestas de Estados Unidos que llevan adelante el Centro de Democracia, Gobernanza e Innovación de la Universidad de Harvard en colaboración con la Universidad de Connecticut, desde que comenzaron los ataques de Israel a Palestina, se registraron más de 3700 días de actividad de protesta en 525 colegios, universidades y escuelas, en 317 ciudades y pueblos de Estados Unidos.
El repertorio de acción en las protestas ha sido variado: barricadas, toma de edificios públicos, banderas palestinas, el símbolo de la sandía, la kufiya, etc. Sin embargo, se destacaron especialmente, las acampadas solidarias, esto es, las tiendas de campañas que se plantaron en los campus universitarios y que se extendieron por diferentes países.
Si bien por las vacaciones de verano estas acciones han mermado, se espera un resurgimiento del activismo cuando los estudiantes regresen a las universidades.
¿Cómo repercuten estas protestas en la campaña demócrata?
El primer día de la Convención, en horario de máxima audiencia, la congresista Alexandria Ocasio-Cortez, ha señalado en su discurso: «Kamala Harris está trabajando incansablemente para lograr un alto el fuego en Gaza y traer a los rehenes a casa». Estas palabras parecen un intento para acercar a Harris con el electorado más de izquierda, representado por AOC.
Más tarde, en sus palabras de despedida, el presidente Joe Biden ha hablado de la necesidad de un alto en el fuego y reconoció que «los manifestantes en la calle tienen razón […] Están muriendo muchas personas inocentes, en ambos lados».
Si bien Harris ha sido más crítica que Biden hacia Israel ―no recibió a Netanyahu cuando este viajó a Washington—, aún no sabemos qué piensa sobre la guerra en Gaza y cuál es su propuesta sobre este conflicto. Este posicionamiento será importante para los jóvenes, especialmente, para aquellos que forman parte de las protestas en los campus universitarios y para los que levantaron sus pancartas en las calles de Chicago. También, será importante los estados clave del midwest como Michigan donde la población árabe es mayoritaria.
La postulación de Harris ha devuelto la esperanza a los demócratas y ha dado un envión a la campaña con una gran energía movilizadora. Ahora, es probable que comience la etapa programática para escuchar las propuestas de la candidata. Y la definición sobre Gaza será un tema fundamental para parte del electorado demócrata.
Fotografía: Mylo Kaye en Pexels
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