PIE DE FOTO ELECTORAL (5)
Los fotografías resisten el olvido. Por eso las guardamos, por eso tenemos esa íntima relación con ellas: son nuestra memoria, nuestra identidad, nuestra historia. Por eso aparecen y reaparecen. Siempre vuelven. Aunque no queramos.
En política, las fotos tienen profundas consecuencias y marcan la trayectoria política de sus protagonistas. Por ejemplo, con el tiempo, olvidaremos la mayoría de las palabras de María Dolores de Cospedal y de Soraya Sáenz de Santamaría, pero nunca olvidaremos la foto conjunta de ambas con mantilla en su visita al Vaticano, con misa incluida. La foto, coincidiendo con el día en que el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación —José Manuel García-Margallo—, hablaba sobre la «Marca España» ha provocado el enésimo choque de conceptos entre formas y fondo del ejecutivo. Todo está relacionado, pero parece que el Gobierno desconoce los flujos y las sinergias de la comunicación.
En la foto Vincent West, Mariano Rajoy y Antonio Basagoiti se saludan en un mitin en San Sebastián. La imagen es contenida, sin euforia, prudente. Conveniente. Esta misma foto, con un Rajoy con el pulgar hacia arriba, o con la irresistible «v» de victoria, hubiera sido otro duro contraste en medio del huracán sobre la deuda y el rescate total a la economía española. Justo el día en que se anunciaba que España y Grecia sufrirán la mayor caída mundial del PIB en 2013, según el FMI.
La composición y la posición de sus manos permite lecturas muy sugerentes. Papeles cambiados. Parece que Basagoiti da apoyo a Rajoy, y no al revés. El candidato es un tipo que intuye bien el momento gráfico. Sabe dónde mirar y cuándo. Lo vimos hace muy pocos días, en el rápido e instintivo gesto que tuvo hacia Esperanza Aguirre evitando que se separara de Rajoy y de él en el encuadre y el plano audiovisual.
El gesto de juntar las manos así, como vemos en esta imagen, lo utilizamos en múltiples registros y situaciones. La proximidad o la equidistancia de las manos unidas al pecho y al cuerpo de una de las dos personas que se saludan, junto con la expresión facial de ambos, ofrece interpretaciones muy diversas: afecto, compasión, solidaridad, ánimo, complicidad, confianza, suerte o relevo. ¿Qué hay de todo ello en su saludo? ¿En qué proporción?
Es todavía muy pronto para saber si esta foto es premonitoria de algo más que un simple saludo de entusiasmo fabricado, tan propio de los procesos electorales, implacables con los que se desaniman antes de tiempo y ofrecen signos de debilidad, fatiga o preocupación.
Con el tiempo, esta foto adquirirá otra dimensión, otra valoración. Los líderes cambian de suerte y de destino. Y estas fotografías les unen, para lo bueno y para lo malo, en algo más que el presente. Condicionan, sobre todo, su futuro recordándoles lo que fueron y con quién. Por eso, a lo largo de la historia, la manipulación fotográfica en política ha sido el recurso para falsear la realidad, alterando el pasado. Pero eso es otra historia. La nuestra es que hoy, Rajoy y Basagoiti, están juntos y unidos. Veremos lo que depara el futuro.
Publicado en: El País (9.10.2012) (blog Micropolítica)
Fotografía: Lucía Garó para Unsplash
[…] Basagoiti ha teatralizado una acción simbólica: una tirada de soka-tira contra jóvenes de su partido, ataviados con camisetas con los nombres de líderes nacionalistas. Esquematismo simple, efectividad imprevisible. La foto de Luis Alberto García recoge, perfectamente, toda la escena. Que la situación sea una impostura no impide el interés informativo y el esfuerzo creativo del periodista gráfico: composición cuidada, diagonal dibujada. Además, el candidato, como casi siempre, sabe dónde mirar. […]