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Rumbo a la Casa Blanca (resumen semanal): El Medio Oriente, una huelga y un huracán amenazan el plan demócrata

MARTÍ SÁEZ

Resumen semanal de la actualidad asociada a las ELECCIONES USA 2024.

Lo nuevo
La campaña de Harris ha encontrado obstáculos inesperados que podrían cambiar el rumbo de la contienda. Tres crisis simultáneas han afectado a su mensaje y estrategia: el conflicto en el Medio Oriente, una huelga de trabajadores portuarios y un huracán devastador en el sudeste de Estados Unidos​. Vamos paso a paso.

Primero, el conflicto entre Israel e Irán ha capturado la atención mundial. Harris, como vicepresidenta, ha sido parte activa en las decisiones del gobierno para intervenir, respaldando los ataques de Estados Unidos contra misiles iraníes dirigidos a Israel. Aunque esto la coloca en una posición de liderazgo, también la vincula más directamente a la administración de Biden, lo que puede ser problemático para una campaña que busca proyectar renovación y no continuidad​. Además, la relación con el ala más progresista, que es también propalestina, pone en riesgo la campaña de simplicidad ideológica planteada por el equipo demócrata. Flor Paz nos hablaba en la guía hace unas semanas sobre la importancia del posicionamiento de Harris en esta materia, tras las protestas que tuvo que afrontar Biden.

Trump y sus aliados no han tardado en señalar que la situación global está fuera de control bajo el mando demócrata, y lo contrastan con lo que consideran los logros de estabilidad durante el gobierno de Trump.

Luego está la huelga de los trabajadores portuarios, que ha paralizado puertos clave en las costas del golfo y del este, afectando el comercio y la economía. Esta huelga no solo amenaza con agravar los problemas de la cadena de suministros, sino que también coloca a Harris en una posición complicada: su partido depende fuertemente del apoyo sindical, pero la huelga podría causar grandes pérdidas económicas en medio de la campaña, algo que no gusta a los republicanos moderados a los que Harris quiere llegar. Mientras Trump y su equipo critican la falta de acción, Harris debe equilibrar su apoyo a los trabajadores con la urgencia de resolver la crisis antes de que impacte negativamente en los votantes.

Finalmente, el huracán Helene ha devastado partes del sudeste del país, dejando más de 180 muertos y afectando regiones claves como Georgia y Carolina del Norte, ambos estados de alta relevancia electoral. Harris ha tenido que interrumpir su campaña para supervisar la respuesta federal al desastre y, aunque su gestión de la crisis podría mostrar su capacidad de liderazgo, también ha permitido a sus oponentes pintar una imagen de caos y descontrol​. Es una prueba perfecta para demostrar si está capacitada o no para gobernar el país ante sus posibles votantes.

Este trío de crisis ha complicado el mensaje de Harris, quien busca presentarse como una líder enfocada en un futuro mejor, generando consenso más allá de la ideología. Ahora, debe demostrar que también puede manejar los desafíos del presente ante un Trump que está aprovechando para señalar fallos en el liderazgo demócrata.

El dato
Esta semana se produjo el debate electoral entre los dos candidatos a vicepresidente, JD Vance y Tim Walz. Fue un debate tranquilo, moderado y que no cambió demasiado las cosas. Tal como recoge Antoni Gutiérrez-Rubí en su crónica, los candidatos parecían más preocupados por no cometer errores que por ganar el debate.

Pero nos quedamos con una curiosidad sobre la penetración de temas de campaña. Antes del debate, Google Trends mostraba un mapa diverso sobre las búsquedas en Google, justo al acabar el debate el tema más buscado en los cincuenta estados era el aborto. Lo recogió Danielle Butterfield en esta imagen:

@likebutterfield

Veamos cómo se abordó el tema en el debate: Por un lado, JD Vance moderó más que nunca el posicionamiento de su partido en este campo. Afirmó que quiere proteger las vidas, pero se comprometió a que este derecho sea regulado en cada estado y descartó una ley nacional sobre el tema. Sin embargo, fue autocrítico con sus compañeros y afirmó que, como republicanos, deberían hacer mucho más para recuperar la confianza de los votantes en la gestión del aborto. Una síntesis perfecta de lo que Vance hizo en este debate: moderarse y demostrar que es un político camaleónico capaz de cambiar su discurso en función del entorno en el que se encuentre.

Por su parte, Walz buscó atacar los sentimientos de los votantes. Como el hombre corriente (y sensible) que es se preocupa por la gente. En concreto, se preocupa por Amber Thurman y Candi Miller, dos mujeres que perdieron la vida al tener que desplazarse de estado para abortar. Algo de lo que el coach responsabilizó a Trump por haber puesto fin a la sentencia Roe vs Wade. Y atacó las propuestas de estricto control del embarazo incluidas en el 2025 Project, lo que Walz define como el programa electoral (no oficial) de los republicanos.

El resultado del debate sobre el aborto, que captó gran parte del tiempo, fue el más rotundo entre los televidentes, según la encuesta posterior de CBS. Según ellos, Walz abordó mucho mejor este tema que su adversario.
La anécdota
En la campaña de Harris, ha habido un cambio notable hacia un discurso más inclusivo, lo que refuerza la idea de que el Partido Demócrata busca posicionarse como un Catch-All Party. Un ejemplo clave de este enfoque es cómo han reconfigurado su mensaje sobre el aborto, enmarcándolo bajo el concepto de libertad personal, una noción menos compleja en lo ideológico y históricamente más asociada con el Partido Republicano. Este cambio busca atraer a una base más amplia de votantes, especialmente a aquellos moderados y conservadores descontentos con el extremismo de Trump. Un buen ejemplo de la triangulación de Kamala de la que nos hablaba Antoni.

Esta misma semana hemos visto un paso más en la moderación demócrata al recibir el apoyo de figuras republicanas como Liz Cheney, quien ha pedido el voto para Harris en un mitin, en otra muestra de esta estrategia. Cheney, con un fuerte pedigrí conservador, fue clara al afirmar que aunque no coincide con Harris en todos los temas, su prioridad es la defensa de la democracia.

Este tipo de apoyo, procedente de republicanos tradicionales, o el uso de conceptos republicanos, refleja el esfuerzo demócrata por captar a votantes desilusionados, reforzando así su posición como un partido que abarca un amplio espectro ideológico en un momento de polarización extrema​. ¿El peligro? Perder a gente por el lado izquierdo si las huelgas y las guerras siguen copando titulares.

(Más recursos e información en ELECCIONES USA 2024)
Fotografía: White House – Pexels

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